Los estudiantes pueden proporcionar respuestas corporales durante la lección,
por ejemplo: si entienden lo que se acaba de explicar se ponen un dedo en la
sien; si no, se rascan la cabeza; cada vez que encuentren algo en el texto que
les parece anticuado, fruncen el ceño; etc.
¿Cómo usar la inteligencia cinética para enseñarle a los niños(as) en el
aula inclusiva?
La enseñanza que tiene como objetivo el desarrollar
la inteligencia cinética de los niños(as) tiene como objetivo presentar el contenido
de la lección de manera interactiva y participativa.
1. Presentando la
información cinética
El niño(a) que aprende con cinética necesita
actividades que le permitan actividad física, experiencias concretas y
manipulación. Los estudiantes aprenden mejor cuando la actividad de aprendizaje
permite que el niño(a) se mueva. El niño(a) con deficiencia de atención se
beneficia de este enfoque ya que el tiempo requerido de concentración es
reducido.
2. Estas son maneras de
representar la información de manera cinética.
Existen varias estrategias para las aulas que
facilitan el aprendizaje para los niños(as) que necesitan actividades físicas.
· Danza
· Bosquejos,
movimientos o gestos, mímica, charadas
· Deportes
· Manipulación
de objetos
El papel del
maestro(a): Preparando actividades que permitan que
los niños(as) con inteligencias cinéticas a que se muevan facilita el
aprendizaje para este tipo de estudiantes. Un niño(a) con inteligencia cinética
necesita pararse, moverse de su lugar. Se les debe proveer con oportunidad de
moverse. Esto puede ser simplemente el pedirle a la clase que se pare y hacer
un minuto de ejercicios guiados (juegos como: “Simon Dice”) o incluir un
bosquejo de diez minutos que los alumnos presenten para poder demostrar una
lección de historia.
El(la)
estudiante: El estudiante necesita aprender a
expresarse de diferentes maneras y en situaciones variadas. Levantar la mano en
clase es una manera física y simple de expresarse. Una sonrisa es otra manera
de comunicar sentimientos sin hablar.
El niño(a) con
discapacidades: Frecuentemente, el niño(a) con
discapacidades físicas necesita oportunidades de practicar sus habilidades
motoras finas y gruesas. En un ambiente que fomente el movimiento, el
niño(a) tendrá muchas
oportunidades de moverse. Por ejemplo, él o ella serán capaces de contestar
señalando la solución a una suma o para indicar su edad. El maestro(a)
también puede invitar al niño(a) a escribir una respuesta en la pizarra. Hay
muchas maneras de permitirle al niño(a) con discapacidad que se mueva. El
niño(a) con discapacidad intelectual también necesita moverse; esto previene
que estén sentados pasivamente durante una lección y les permite la oportunidad
de interactuar positivamente con sus compañeros.
Referencias
electrónicas: http://educacionadistancia.juntadeandalucia.es/profesorado/autoformacion/pluginfile.php/2568/mod_forum/intro/Inteligencias_Multiples%20en%20una%20escuela%20inclusiva.pdf
Resumen del Departamento de Orientación
del libro “Las inteligencias múltiples en el aula: guía práctica para
educadores”. Armstrong, Thomas. Ed/ Paidos. Barcelona. 2006. [en línea]:
[Fecha de consulta: 13 de agosto de 2015]. Disponible en: http://www.orientacionandujar.es/wp-content/uploads/2015/05/Armstrong-2.pdf
Es importante que, los docentes realicemos actividades diagnosticas para poder determinar la diversidad de inteligencias que se encuentren en el aula y aplicar, las más adecuadas, en nuestras estrategias para la enseñanza. En el caso de la inteligencia kinestésica-corporal, es la más visible dado que siempre nos encontramos en el salón de clases el alumno inquieto, que todo le aburre, interrumpe y sale al baño por un largo rato (tal y como indica Thomas Amstrong). En estos casos, algunos docentes, lejos de integrar proceden a excluir a estos niños o adolescentes que poseen características claves para aplicar actividades sencillas que permitan la inclusión y promuevan el aprendizaje significativo.
ResponderBorrarDarlanis Belmonte. Estudiante Geografía e Historia. UPEL-IPC